Por Vania Avilés Campos
Durante esta pandemia nos hemos reinventado, aprendido cosas nuevas o creando una nueva rutina. ¿Y sabes qué puedes hacer siempre? ¡Aprender idiomas!
¿Cuántas veces nos proponemos aprender algo y dejamos pasar el tiempo? Hay muchos proyectos que un día por la mañana estuvieron en nuestra lista de pendientes y los dejamos pasar.
¡Pero aprender idiomas puede ser parte de una rutina cotidiana! Además, uno siempre aprende al escuchar, leer o entender nuevos conceptos. Dominar un idioma requiere tiempo y constancia.
Si estás pensando que el dinero es una limitante, te equivocas, porque en la actualidad lo digital tiene su versión gratuita.
De acuerdo con los expertos en el área, lo primero que se requiere para aprender algo nuevo exitosamente es: «motivación», del latín motivus (relativo al movimiento).
Enseguida, es importante considerar metas reales e iniciar con tiempos cortos de dedicación, ¡pero constantes!
Si dudamos de qué tan constantes debemos ser, basta ver la constancia de un bebé al aprender a decir sus primeras palabras.
Después, se recomienda elegir el idioma que se desea aprender con base en lo que nos motiva a aprenderlo.
Para aprender idiomas, elige recursos audiovisuales en línea (hay una gran variedad de gratuitos) que estén relacionados con nuestros gustos: música, películas favoritas, caricaturas, programas de cocina, belleza, etc.
¡Este primer paso debe ser sumamente atractivo e interesante! Es esencial recordar que nuestras metas serán cortas, pero reales. Recuerda que todo es mejor que nada, así que felicítate cada día que hayas cumplido con el cometido.
Una vez que tu cerebro identifica el idioma de forma auditiva, se te sugiere buscar en línea, ya sean páginas y/o aplicaciones gratuitas para consolidar la parte escrita.
Por último, si ya lograste incorporarlo como parte de tu rutina diaria, es momento de pulir todo lo aprendido.
Para esto se sugiere que busques una opción en línea más formal, aunque para este paso si habría que ver cuál sería el presupuesto dirigido al proyecto.
Finalmente, recuerda el famoso dicho: «El que persevera alcanza». ¡Y aprender idiomas es un gran incentivo para tu desarrollo!