Las emisiones de CO2 y otros gases nocivos a la atmósfera es por nuestra causa, pero hay un factor adicional: la Luna también tiene que ver en el calentamiento global.
¡Sí! La Luna podría ser directamente responsable de la liberación de metano a la atmósfera terrestre, incrementando el efecto invernadero.
Este gas mucho más eficaz que el dióxido de carbono a la hora de atrapar el calor. ¿Pero cómo llegaron a estas conclusiones?
Los investigadores explican que este extraño y aún poco conocido efecto lunar se debe a las mareas y al arrastre que la atracción gravitatoria que la Luna ejerce sobre ellas.
Tomando detalladas mediciones durante cuatro días y cuatro noches consecutivos, los científicos lograron cuantificar este fenómeno en el Océano Ártico.
Las «fugas» de metano en este océano se producen desde hace miles de años, normalmente causadas por actividad sísmica o volcánica.
Andreia Plaza-Faverola, geofísica de la Universidad de Tromsø, Noruega, comentó sobre la investigación, publicada en Nature Communications.
«Las acumulaciones de gas que se encuentran en los sedimentos a un metro del fondo marino son vulnerables a cambios de presión incluso muy leves.»
«Una marea baja significa menos presión hidrostática y una mayor liberación de metano, mientras que una marea alta equivale a una presión mayor y a una menor descarga.»
¿Se podría predecir la cantidad de metano liberada en el Océano Ártico? Probablemente sí, incluso con variaciones de la marea inferiores a un metro.
Una de las principales conclusiones es que la liberación de este gas del lecho marino está mucho más extendida de lo que muestran los datos de los sonares convencionales.
El efecto de la Luna no se había considerado hasta ahora, pero los resultados de la investigación demuestran una notoria influencia del satélite terrestre.
¡Muy interesante!