Cómo ayudar a los niños a superar el divorcio de sus padres.
Por: Colegio Cuernavaca
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Por Belem Capetillo.
En un divorcio, los más afectados pueden ser los pequeños.
Un divorcio no es sencillo para nadie, así que, si te estás separando, asegúrate de gestionar correctamente tus emociones pero no te olvides de tus pequeños. Los niños también necesitan entender qué es lo que está pasando para, entonces, enfrentarlo.
Debes saber que tus hijos se verán sí o sí afectados por esta situación, pero ese no debe ser el motivo por el que tú y tu pareja permanezcan juntos. Una familia físicamente unida pero emocionalmente distanciada daña aún más el autoestima de los pequeños. Un divorcio es duro pero, a veces, es lo más sano.
Así que no te enfoques en el lado negativo, los niños pueden salir de un proceso de divorcio mejor preparados para afrontar el estrés y la ansiedad propios de la vida, muchos de ellos se convierten en adultos empáticos y más flexibles al cambio.
Consejos para padres que atraviesan una separación.
Son tus problemas, no de tus hijos. Por favor, no discutas frente a tus pequeños, no los pongas contra uno de sus padres, no tiene por qué escuchar comentarios negativos sobre las personas que más quieren en el mundo. No conviertas un divorcio en una batalla campal.
Tus pequeños pueden entenderlo. No invalides sus comentarios y emociones. Háblales con la verdad, por supuesto, tu lenguaje y expresiones deben adaptarse a su edad. Es importante que sepan también qué es lo que pasará con la familia, con ellos y con papá y mamá por separado.
Respeta sus rutinas. En la medida de lo posible, procura que tus hijos sigan haciendo lo que les gusta en tiempo y forma, que se levanten siempre a la misma hora y que no falten a sus clases extracurriculares. Su panorama ha cambiado con el divorcio, no pongas el resto de su mundo de cabeza.
Ayúdalos a expresar sus sentimientos. Pregúntales cómo se sienten, qué les duele, déjalos que vivan su duelo pero hazles saber que, eventualmente, se adaptarán a las nuevas circunstancias y que estarán bien. Déjales bien en claro que el divorcio no fue su culpa.
En la medida en que tú te esfuerces por gestionar tus emociones y estar mejor, ellos también lo estarán. No es necesario que sus padres sean siempre fuertes, la vulnerabilidad te ayudará a conectar con tus pequeños.