Tras casi dos años de pandemia, estamos teniendo un sano regreso a clases de forma gradual, y para ello necesitamos minimizar las posibilidades de contagios siguiendo las medidas de protección habituales.
Las medidas las conocemos perfectamente: uso constante de cubrebocas, aplicación de gel antibacterial y un sano distanciamiento social.
Además, nuestros profesores y administrativos estaremos recibiendo el refuerzo de la vacuna, ¡porque la educación de nuestros hijos no puede esperar!
Vivir la pandemia ha sido todo un reto y nos vimos en la necesidad de cambiar radicalmente rutinas que establecidas, pero juntos lo hemos logrado.
El tomar clases en línea, desde una computadora o un celular, donde mamá o papá o algún otro familiar se sienten al lado de los más pequeñitos para ayudarles a realizar sus tareas, ha generado grandes esfuerzos por parte de toda la familia.
Y si bien no estamos al 100% de vuelta en las aulas de forma presencial, estamos avanzando hacia eso día con día.
Al haber iniciado clases presenciales, es de suma importancia establecer una rutina durante todo este tiempo en casa y generar una nueva.
Hay que incentivarlos desde ahora a seguir el orden de una rutina (cualquiera que sea) y sobretodo inculcarles la disciplina al seguirla.
Por ejemplo, despertarse a la misma hora, desayunar, tener un espacio asignado y tiempo determinado de estudio, incluso, tener claro, los horarios de juego.
Cabe mencionar que es importante que el periodo de sueño de los niños es vital para un buen rendimiento escolar, por lo que les recomiendo establecer rutinas de sueño a determinadas horas del día, dependiendo su edad.
La Academy of Sleep Medicine (AASM), recomienda que los niños de 3 a 5 años, deben dormir de 11 a 14 horas diarias y los niños de 6 a 12 años, deben de dormir de 9 a 12 horas diarias.
Confiemos de que esta pandemia nos traerá grandes cambios, pero sobretodo aprendizajes que se quedarán por siempre en nuestra vida.
¡Tengamos todos un sano regreso a clases!